Martes 5 de abril de 2022
Mas Dios encarece su caridad para con nosotros, porque siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
-Romanos 5: 8
“Tan pronto como hubo pecado, hubo un Salvador. Cristo sabía que tendría que sufrir, aun así se convirtió en el sustituto del hombre. Tan pronto como Adán pecó, el Hijo de Dios se presentó como fiador de la raza humana”. – In Heavenly Places, 13. 2 en Ingles.
“El Hijo de Dios… ha cumplido su promesa y ha traspasado los cielos para tomar sobre sí el gobierno de las huestes celestiales. Cumplió una fase de Su sacerdocio al morir en la cruz por la raza caída. Ahora está cumpliendo otra fase al suplicar ante el Padre el caso del pecador arrepentido y creyente, presentando a Dios las ofrendas de Su pueblo. Habiendo tomado la naturaleza humana, y habiendo vencido en esta naturaleza las tentaciones del enemigo, y teniendo la perfección divina, a Él le ha sido encomendado el juicio del mundo. El caso de cada uno será presentado ante Él. El pronunciará juicio, dando a cada uno según sus obras”. – Manuscrito 42, 1901 en Ingles
Pregunta que proviene del corazón: Cuando Adán y Eva pecaron, fue Dios quien, a pesar de haber sido rechazado y ver el pecado contra Él, dio el primer paso hacia la humanidad. Vino con una actitud de gracia, perdón y con la promesa de que Jesús aplastaría a la serpiente Satanás (Génesis 3: 15) y se convertiría en el sacrificio para su salvación. Cristo todavía camina hacia ti con esa misma actitud. Él está comprometido contigo y con tu salvación. ¿Correrás hoy a Sus brazos amorosos y aceptarás Su sangre limpiadora y Su justicia?
- Oremos para que Dios te abra los ojos a Su infinito amor y perdón por usted. Pídale que le muestre más de Su carácter amoroso cada día y cómo aceptar Su perdón.
- Oremos para que los miembros de la iglesia en la República de Dominica comprendan que la Iglesia Adventista del Séptimo Día es un movimiento profético con un mensaje profético al que el cielo le ha confiado una misión profética especial. Ahora es el momento de brillar para la gloria de Dios.
- Oremos por los ancianos y los niños, los más vulnerables entre nosotros.
- Oremos por los miembros de la iglesia que enfrentan dificultades financieras.